A los pies del tercer monte más alto del mundo, Kanchengunga; nos levantamos a las 4 de la mañana, para ver amanecer desde este punto, por si el kanchengunga se veía......, no se vio, pero el viento es agradable aunque sea frío, se respira paz y libertad...., la sensación de euforia y alegría que produce el paisaje entrando por la retina.....,aquí la felicidad penetra por los ojos.......no hay gente, no hay ruidos, es tan fácil no distraerse con vanalidades, que aquí sólo se siente la profundidaz de uno mismo..... Las nubes tapaban el Kanchengunga, pero hacían que sintiéramos que estabamos volando....., en el cielo. Francamente no importaba que no vieramos aquel monte....., porque estaba allí......
miércoles, 10 de septiembre de 2008
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4 comentarios:
esa atzi,como siempre sorprendiendo,unas fotos mu chulas,sigue asi.
Joer, vaya pinta de viaje... im-presionante
Por cierto, Rumpelstinski es Aitziber??
Que perra, vaya viaje... y ahora a Perú
Uy.. me he dejado llevar por las fotos y la envidia sin leer antes el texto...
Cuanta belleza y que paz...
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